Los responsables del conflicto del transporte son los que aplican el modelo neoliberal

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*Junta Ejecutiva Provincial del Partido Solidario
Córdoba se encuentra paralizada y nuestros dirigentes políticos encabezados por el intendente Ramón Mestre no están a la altura del conflicto. En el legítimo reclamo que tienen los trabajadores de UTA por un incremento ya acordardo por paritaria nacional, los obreros reclaman lo que les pertenece.
Los trabajadores colectiveros han estado en el eje de la discusión, sin embargo el ofrecimiento que recibieron de parte de las empresas es irrisorio, porque no se ajusta a la inflación que por estos días vienen sufriendo Córdoba y el país y porque no se cumple con la paritaria.
Esto sumado a un modelo neoliberal que genera cada vez más desigualdades, pérdida de poder adquisitivo en la clase media y en las clases populares y un creciente conflicto social.
Si a esto añadimos que desde la asunción del radical Mestre, el boleto aumentó de manera desmedida en un valor que ronda los 10 pesos y que esos aumentos superaron los porcentajes de inflación del período, estamos hablando de que el Municipio tiene una clara postura en este conflicto y esa postura es favorecer a las grandes empresas que ahora buscan bajar “los costos” laborales para obtener mayor ganancia. En estos años su ganancia la pagó el usuario, ahora van por los trabajadores.
La salida no es profundizar la grieta como pretende Mestre. Nuestros gobernantes son responsables. La salida no es aplicar mano dura, tal como la esencia del neoliberalismo propone. Creemos en que la salida es el diálogo entre las partes y es necesario que se cumpla con lo acordado.
Asimismo queremos recalcar la situación del usuario. Es la vecina y el vecino de Córdoba quienes a diario sufren el mal servicio, las demoras y el alto costo. Somos las cordobesas y los cordobeses quienes una vez más pagamos esta situación y Mestre sigue beneficiando al sector concentrado que no invierte lo que debiera para tener un buen servicio.
Por ello nos solidarizamos con los trabajadores y asimismo exigimos no sólo una revisión salarial, sino también un servicio acorde a la necesidad del pueblo, con un costo racional y sin beneficio de los empresarios, sino de los usuarios.

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