Iniciativa política y solidaridad

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Por Juan Carlos Junio, Secretario General del Partido Solidario

El gobierno, por un lado, sostiene la lucha diaria contra la pandemia, por otro, refuerza la acción política con una serie de iniciativas parlamentarias.
Por ejemplo, la Comisión Bicameral de seguimiento de la Deuda externa resolvió investigar el proceso de endeudamiento que sufrió el país entre 2015 y 2019 y ya pidió informes al Banco Central, a la Unidad de Información Financiera (UIF) y al Ministerio de Economía.
Según un informa del BCRA, la fuga de capitales en el período comprendido entre diciembre de 2015 y octubre de 2019, superó los 86.000 millones de dólares. El 1% de las empresas del país explica las tres cuartas partes de esta fuga enorme realizada por personas jurídicas. De igual forma, el 1% de las personas humanas, dan cuenta del 22% de la fuga de capitales realizadas por los individuos.
Es de una gran trascendencia investigar como fueron los procedimientos que condujeron a ese enorme endeudamiento del país, no sólo para sancionar los eventuales delitos que se pudieron haber cometido sino también para saber qué es lo que hay que hacer o que hay que modificar para que ese endeudamiento no vuelva a producirse nunca más.
Hay otros proyectos de ley que también van a elevar el protagonismo del Parlamento en los próximos tiempos: el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, el proyecto de ley de reforma de la justicia y el proyecto de ley de aporte extraordinario a las grandes fortunas, entre otros.
Son todas iniciativas trascendentes que, por supuesto, van a generar polémica y conflicto de parte de los sectores económicamente afectados. Para eso está la democracia: para que se discuta, se delibere y se polemice. El ejercicio de la democracia siempre mejora la democracia. El Parlamento será, en el próximo tiempo, una caja de resonancia de los problemas políticos más importantes que vivimos en la actualidad.
También se espera el informe sobre el funcionamiento de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el último periodo, que se presentará ante la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia del Parlamento, presidida por el diputado Leopoldo Moreau.
Esencialmente lo que quiero señalar es que entramos en una fase muy interesante porque el debate, la polémica, la confrontación, nos ayudarán a mejorar la democracia y, en la medida que estos proyectos de leyes triunfen, ello conducirá a modificar el mapa político y social de la Argentina y a ponernos en la senda de la construcción de un país mejor, más inclusivo, igualitario y fraterno.
Pero no sólo suceden cosas en el Poder Ejecutivo y en el Parlamento. También pasan en la sociedad donde se percibe una enorme movilización solidaria hacia los sectores más vulnerables. La Argentina, como muchos otros países hermanos de Latinoamérica y el mundo, sufre crisis superpuestas: por un lado la crisis de la pandemia, por otro la crisis económica y social que la precede. Esa combinación afecta de modo desigual a distintos sectores de la sociedad. En el marco de la pandemia, el sector que puede un poco más se ha volcado a ayudar al sector que puede menos. Nuestro partido, haciendo honor a su nombre, interviene activamente en ese proceso y ello nos llena de satisfacción.

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