Situación social en Argentina y Latinoamérica, camino a seguir

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*Por Pablo Tissera, miembro de la Junta Provincial del Partido Solidario Córdoba.
América latina es una región donde la pobreza y la indigencia son problemáticas que atraviesan las fronteras nacionales. Según los últimos datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), un 29,2% de los latinoamericanos (que representan 175 millones de personas) eran pobres a fines de 2015. Mientras que la indigencia llegó al 12,4% a nivel regional. Esto significa que en América latina hay 75 millones de personas en situación de extrema pobreza. En Uruguay, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística correspondientes a fines de 2015, hay 9,7% de pobres y 0,3% de indigentes. En el caso de Chile, la pobreza asciende al 11,7%, con un 3,5% de indigencia, según las estimaciones del Ministerio de Desarrollo Social local. Distinta es la realidad en Paraguay. Allí, informó la Secretaría Técnica de Planificación, un 22,24% de la población está debajo de la línea de de pobreza, mientras que un 9,97% está debajo de la línea de indigencia. ¿Qué se entiende por línea de pobreza? La medición de la pobreza con el método de la “línea de pobreza” (LP) consiste en establecer, a partir de los ingresos de los hogares, si estos tienen capacidad de satisfacer -por medio de la compra de bienes y servicios- un conjunto de necesidades alimentarias y no alimentarias consideradas esenciales.
En la Argentina informó el Indec en estos días que el segundo trimestre de 2016 cerró con un 32,2% de pobreza y un 6,3% de indigencia. En la Región Pampeana, de interés para los Cordobeses,  integrada por Gran Córdoba; Río Cuarto; entre otras localidades como Bahía Blanca; Gran La Plata; Gran Rosario; Gran Santa Fe; Mar del Plata; los datos arrojaron una Pobreza del 32,6% e Indigencia por 7,7%. Por encima de la media nacional.
Detrás de estos números existen diferencias en la situación de cada país, de cada región dentro de nuestro país, pero podemos resaltar: La significativa diferencia respecto de países hermanos como Uruguay, Chile y Paraguay con niveles de pobreza e indigencia mucho más bajos que los de Argentina… Además, la altísima desigualdad social y económica en la distribución de las riquezas, producto de la concentración y extranjerización de la economía, particularmente en nuestro país…
Nos preguntamos: ¿podremos caminar hacia un objetivo de pobreza cero?
Desde nuestro lugar, como militantes del Partido Solidario, como cooperativistas preocupados por la comunidad y promotores de la economía social, solidaria y pyme, creemos que el camino hacia la pobreza cero se logra con más producción nacional, más trabajo, más desarrollo del mercado interno, más inclusión social, con un Estado presente que intervenga con políticas públicas que regulen la economía y busque incansablemente la disminución de la brecha gigante que hay entre ricos y pobres.

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